La vida digital ahora suena a lo más vital. En la estancia pre pandémica ya era importante y ahora parece ser el universo estelar en el que tenemos «fiestas», videollamadas con amigos, clases, juntas y hasta catas de vino. Para inicios de mayo 2020 el algoritmo hizo de las suyas en mi Spotify y me permitió descubrir esta joya.

Estas cuatro frasesitas llenas de otredad llamaron toda mi atención. Kanaku y El Tigre es una banda peruana que se junta a hacer lo que les nace. Su música es una mezcla de psicodelia, cuasi poesía y algunos gritos ocasionales. Alternativo realmente y tan disfrutable como un soft pop.
¿La pandemia nos hace ver la vida más de cerca? Seguro en estos meses varios mandamos ese mensaje a un conocido que ahora parece más un lejano o esa persona con la que las palabras «te extraño» nunca caducan. Este disco ronda por los universos contemplativos que podemos estar viviendo desde casa gracias al coronavirus: el terror de la doble palomita azul, el verano desde la ventana y las nostalgias a destiempo.
Las favoritas
#Ansolo es el retrato de la trampa de ser un adulto nacido entre los 80s-90s.

Vives de verano es una canción que habla de la ansiedad del saber, soñar despierto y como el tiempo pasa sin verlo a través de la pantalla de tu celular.

Eso lo quiero sentir comienza con unos golpecitos sutiles de batería que tejen y crecen la historia de la nueva eternidad. Esta canción parece eso, un loop infinito de realidad y placer.

Las rarezas
Si se mantienen en el disco, a la mitad de escucharan dos voces conocidas: Kevin Johansen preguntando tiernamente ¿quiero saber quién es tu novio? y al gran Jorge Drexler pidiéndote que abras los brazos como un avión.
Aunque hoy en día el reggeaton hace más de las suyas y le da presencia a nuestro idioma, prestarle oído a lo que tenemos que decir en español cuesta trabajo. Este álbum es una perfecta fotografía de nuestros momentos internos hoy.
Bonus track: Su primer radio hit, Bicicleta.
¿Sí le dan zoom pueden ver África? Con este disco, yo pienso que sí.
